COMENTARIO
Tras el Discurso de las Parábolas el evangelista narra diversos milagros y enseñanzas de Jesús en Galilea y regiones limítrofes. Se va mostrando que, ante Jesús, el hombre debe tomar partido: o con Él o contra Él. Mateo, desde el Discurso de las Parábolas, señala con claridad tres grupos de personas: de un lado, los discípulos —y en especial Pedro— cercanos a Jesús; de otro, las muchedumbres que le siguen pero sin acabar de entenderle; finalmente, las autoridades religiosas que traman asechanzas contra Él. La sección culmina con la solemne confesión de Pedro en la que proclama a Jesús Mesías e Hijo de Dios (16,16).